23-25 diciembre
Y de Salvador escapamos porque al momento de pagar el segundo día de posada, mis ojos cayeron el anuncio del recital de los Paralamas de esa misma noche en Praia do Forte, donde habíamos pensado en ir a la mañana siguiente. Justo ellos!! Si en los últimos meses no había hecho otra cosa que escuchar muchas veces Perplexo o Lanterna dos Afogados recordando viejísimos tiempos!
Asi que cerramos las valijas, salimos a caminar unas horas y partimos a Praia!...
Hicimos no mas de 80 km, pero por las diferencias parecían miles, Praia do Forte es un lugar turistico, y solo eso.. mas playas y playas estupendas, pero para mí era el lugar perfecto para pasar esa Navidad robada a Italia..!
Gran vida la primera noche con el recital de Paralamas, a solo un metro del escenario, con mucha, mucha gente detrás, en una disco improvisada como un oasis en el desierto, pero que tenía hasta computadoras! Al regreso nos negamos a pagar 10 dolares por 2 km en un taxi-motoneta y regresamos a pie hasta que me tiré a la oportunidad de uno de los últimos autostop (dedo) de mi vida, que nos llevó hasta la posada en 2 minutos!
De día las infaltables caminatas en las playas hasta que encontrábamos con lugares increíbles.
El 24, mientras en Italia se ultimaban los preparativos para 3 horas consecutivas de antipasto, primo, segundo, pannettone, pan d'oro... nosotros nos sentamos en la playa pedimos dos caipirinhas y un enorme plato de langostas!!
La cena, a centro de Praia vacío, con todos encerrados en casa festejando, la hicimos en compañía de Andrea (foto), otro italiano marinero con el oceáno a cuestas.
El 25, después de otro giro mas por la playa, escapamos rumbo al aeropuerto de Salvador para volver a la deseada Río!
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