Fue el 12 de agosto del 99, un submarino ruso desapareció primero y después se hundió (vaya redundancia) en aguas del mar de Barents (Noruega) y con el murieron (asfixiados) 118 marinos rusos.
Recordaba algo vagamente, hasta que Max me comentó un artícolo de Repubblica (diario italiano) sobre el resultado que investigadores canadienses realizaron por cuenta propia, sin intervención del gobierno ruso. En el momento se dijo (dos días después que sucediera) que el submarino se hundió por una explosión interna que afectó el reactor, el gobierno ruso no permitió la ayuda de los noruegos sino hasta pasados 9 días para recuperar a quienes podían aún estar con vida, y así, poco a poco todos murieron, llevándose, quizás, algun secreto militar.. Fue extraña también la reacción de Putin, hombre frio y calculador como pocos, que vivió la tragedia bajo una sombrilla en el Mar Negro... Todo esto, para decir, que la investigación no oficial (lamento no poder encontrar el artículo de Repubblica) demuestra la teoría que el Kursk se hundió debido a un ataque de misiles provenientes del submarino norteamericano Memphis, que los rusos lo sabían y por eso no dejaron a los buzos de salvataje acercarse al submarino, y que, milagrosamente, gran parte de la deuda rusa con EEUU fue milagrosamente "saldada" en los 10 días sucesivos a la tragedia...
Ellos.. los fríos y calculadores, jugaron y jugarán siempre con nuestras vidas, pero seguirán viviendo, disfrutando vacaciones, algunos bañados en petróleo, otros bajo las sombrillas del Mar Negro, otros en un yacht en el Mediterráneo y alguno sobre un caballo en Texas...
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