Max (que parece tuviera de verdad un alma argentina, mas allá de su novia) lo encontró la semana pasada por casualidad volviendo de su trabajo... Por casualidad estaba al teléfono conmigo y me dijo "que es esta bandera argentina, que significa este Patio Argentino, este escenario, y este cartel de folklore y tango".

Ese Patio (a metros de Piazza Sempione, a metros de casa!!) resultó ser un "Piccolo Cosquín.." en pleno verano romano, una peña al abierto con bailarines de folklore, malambo y tango sobre un gran escenario, gauchos de verdad que preparan un asado tanto escenográfico como argentino, organizadores y mozos argentinos, y un montón de curiosos italianos que se acercan para quedar sorprendidos ante los movimientos de los artistas sobre el escenario.

Anoche volvimos por tercera vez en una semana, esta vez para festejar el cumple de Dorita. Pedimos las empanadas (excelentes), una botella de vino tinto (que resultó ser un Santa Julia Malbec para la felicidad de Dor), y la infaltable carne...!! Recordamos que cuando eramos chicas e ibamos a comer asado a un restaurant, mamá pedía una bolsa con los huesitos para los perros. Esta vez, Dora dijo, "no trajimos la bolsa porque trajimos a Luna", que festejó comiendo los restos de nuestro asado!!

Estar ahí es sentirse en Argentina, pero estando en Roma!

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